(Algunas fotos del grupo)
Como ya anunciamos en la anterior entrada, el fin de semana pasado hemos estado en Toledo asistiendo y participando en actos del Festival Internacional de Poesía Voix Vives, y hemos vuelto muy satisfechos con este evento cultural de primer orden al que fuimos invitados y en el que hemos podido conocer, oír, aprender y, por supuesto, leer nuestros poemas.
Toledo ha sido una ciudad tomada por la Poesía y la creación artística durante tres días. Los actos con diferentes poetas de varios lugares de España y del Mediterráneo, se han ido sucediendo a lo largo de los horas de cada día sin interrupción. Hasta 3 actos coincidían en muchas horas, de forma que te exigía elegir, y en todos había gente. Una experiencia cultural que ha ocupado las plazas y lugares públicos de esta bella ciudad castellana abriendo con ella un encuentro entre personas, culturas y sobre todo, un enceuntro con la literatura.
Hemos tenido ocasión de oír a poetas de muchos ámbitos y edades, y de vivir ese aire literario que impregnó la ciudad.
Nuestra participación en una Ruta Literaria el sábado por la tarde ha sido una emocionante experiencia literaria, histórica y vital que nos ha llenado de sensaciones que van más allá de las exclusivamente literarias. Un poeta y conocedor como nadie de la historia literaria de Toledo, que es como decir de la historia de la literatura española, Manuel Palencia, fue el guía que nos introdujo en los lugares de la ciudad donde poetas y escritores desde el XVI al XX, tuvieron en sus calles un lugar y momento importante de sus vidas, al igual que lo tuvieron también numerosas obras suyas. Desde Cervantes a Santa Teresa, pasando por Garcilaso y Becquer, San Juan de la Cruz o Calderón, Claudio Rodriguez o Lope de Vega, y por Dalí y Alberti, junto con Rilke o Eisntein (y muchos más), fueron algunos de sus protagonistas. Y en esa ruta, los versos de Manolo Dato, Aurelio Guirao, Mª Pilar López, Martín Iniesta, Isabel Mascuñán, Rosa Campos y Angel Almela, han tenido un hueco importante al ser puestos en el aire de esos lugares literarios, y en los oídos de los asistentes a la ruta (al menos unas 40 personas), por miembros de La Sierpe y el Laúd.
Todo un lujo para este grupo que ha cumplido este año 35 años de vida, y que ha vuelto a ser portavoz de la poesía ciezana.
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